La torre inclinada de Pisa, la más famosa en el mundo, volverá a ser inaugurada el 15 de diciembre luego de casi una década de trabajos de restauración, para evitar que siguiera hundiéndose.
El monumento, que fue declarado patrimonio de la Humanidad por la Unesco en 1987, se levantó en la ciudad de Toscana a partir del 1163 y a pocos kilómetros de la costa del mar Adriático.
Si bien las tareas de consolidación comenzaron en la década del 90, cuando empezó a hundirse, la última fase de restauración arrancó en 2002. En esta ocasión, permaneció abierta a los centenares de miles de turistas que la visitan cada año.
Los trabajos se realizaban por la noche, pero gracias al flujo de turistas se pudo financiar el reciclaje.
La Torre de Pisa es el campanario de la catedral de Pisa y su altura es de 55,7 a 55,8 metros desde la base, su peso se estima en unas 14.700 toneladas y su inclinación de unos 4°, extendiéndose 3,9 metros de la vertical.
La torre tiene 8 niveles: una base de arcos ciegos con 15 columnas, 6 niveles con un anillo externo de columnas y termina en un campanario. La escalera interna en espiral tiene 294 escalones.
El gobierno italiano pidió ayuda el 27 de febrero de 1964 para prevenir su derrumbe, y el 7 de enero de 1990 fue cerrada al público como medida de seguridad. Recientemente fue realizado un trabajo de reconstrucción para tratar de reducir el ángulo de inclinación.
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